Las paredes del Centro Cultural Las Condes fueron testigo de la aparición de un mundo místico, sagrado y espiritual; por unos minutos, el oriente llegó a Chile. Mientras música hindú deleitaba los oídos y los aperitivos se repartían en el pasillo, Francisco Pereda inauguró por la noche de antier su exposición: INDIA NEPAL RECUPERACIÓN DE LA IMAGEN.
Recién llegada a la galería, sentí las miradas inquisitivas de los invitados que más que en una exposición fotográfica, parecían en una fiesta donde todos se conocían previamente. Tarde un poco en acostumbrarme a la mecánica, pues para poder observar con detenimiento las obras del fotógrafo, me veía obligada a empujar a la gente, dado el espacio tan reducido de la sala fotográfica y de la abundancia de los asistentes. Hombres elegantes con traje y corbata, jóvenes en jeans, niños corriendo y comiendo, se podría ver de todo en la galería que albergaba alrededor de 50 personas que no paraban de hablar y reír, mientras intentaban admirar la obra de este fotógrafo chileno.
En su viaje por Asia y África hace más de 8 años, Francisco Pereda obtuvo estas imágenes que lograron capturar la esencia de una cultura desconocida e intrigante; reflejaban tanto la grandeza de la arquitectura y los paisajes como la intensidad de las actitudes y sentimientos, todas marcadas por un enfoque intimista, donde el niño hindú te veía a los ojos o parecía interactuar contigo incluso a través del lente. Con un formato de 70 x 90 cm y tomadas con cámara análoga, las imagenes mostraron una manejo perfecto de contraluces enfatizado por la técnica en blanco y negro; y debido a que soportaron las inhóspitas condiciones de lluvia y calor de la India, tomaron una textura especial totalmente acorde al tema.
Mientras el mesero repartía las copas de vino, los comentarios de los asistentes se hacían notar, algunos parecían extrañados ante la valentía del fotógrafo al presentar dichos paisajes en blanco y negro; mientras otros admirados no paraban de comentar el perfecto uso de sombras: “Algunas fotos te impactan, las luz define maravillosamente las imágenes, pero sin duda lo más impresionante es el tema, te transporta”, comentaban después de sonreír a la cámara de los fotógrafos de sociales.
El artista por su parte no paraba de sonreír orgulloso de su obra y disfrutaba comentándoles a los asistentes las anécdotas que giraron alrededor de cada imagen. Con una actitud sumamente amable declaró que se sentía muy feliz al poder exponer por fin estas obras, ya que le tomó un largo tiempo la selección de negativos y le fue muy dificl conseguir la sala; por otro lado, aseguró: “me gustó que fuera tardado, es bueno observar tu trabajo un tiempo después, te da una perspectiva diferente, más objetiva”.
Con la sonrisa incrustada en el rostro, Francisco Pereda afirmó que su única intención era mostrar mediante estas imágenes lo que vivió; y tranquilamente podemos confirmar que su objetivo se logró. Si bien muchos de nosotros no hemos tenido la fortuna de pisar el suelo de esos intrigantes territorios, hoy me atrevo a decir que aunque sea por unos minutos, se logró entrecruzar miradas con la cultura hindú.
Aquí les dejo una presentación con algunas de las obras expuestas, para ver más, visita la página del artista http://www.franciscopereda.cl/
Copyright: Francisco Pereda
Muy interesante tu artículo, gran descubrimiento este blog.
ResponderEliminarTambién estuve ahí ese día para disfrutar de las fotografías de Francisco.
saludos